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Diálogos Testimonios

Autogestión, identidad, resistencia

Asociación de Artistas Aficionados: Hacia los 85 años de vibración conjunta desde la autogestión y su sostenibilidad.

Por Ximena Arroyo Seminario y Yasmin Loayza Juárez (1)

La Asociación de Artistas Aficionados es una organización privada sin fines de lucro, fundada el 13 de junio de 1938 en la ciudad de Lima. Si bien hablamos de la primera institución cultural del Perú, no pretendemos viajar al pasado sin dejar de tener como referencia el presente y viceversa. Deseamos ubicarnos en el contexto actual valorando la riqueza de la historia y el legado de esta institución, con la intención de revisar las motivaciones, aciertos, desaciertos, resiliencias, resistencias y aprendizajes que han convertido a la AAA en un espacio pionero y determinante en la promoción cultural, el fomento de la creación artística, el desarrollo de la autogestión y en la ruta que dejó hacia la profesionalización de las artes escénicas en nuestro país. Queríamos, en un principio, hablar de la gestión, pero es complejo hacerlo sin mencionar todo lo demás que esto implica. 

Por último, la elección de un formato amigable como el diálogo para el  desarrollo de este texto responde a la intención de recuperar el disfrute de la conversación. Vamos a “recrear”, a transportar al lector a la escena en sí: un café, una cerveza, un vino, un sonido, un olor, un recuerdo, un llanto quizás, la respiración de las protagonistas, la escucha, la inflexión de la voz, el intercambio, las risas y todos los elementos que pueden componer y que son parte de la escena en una conversación, convirtiéndola en un disparador de ideas estimulantes y creatividad.

Sin lugar a duda, este formato también responde a las dinámicas en las que se mueve la interacción en la AAA y, por supuesto, de alguna forma influye que ambas autoras pertenezcamos al mundo del teatro. Por ello, inevitablemente, este texto cargado de verdad contiene algo de ficción.

DÍA 1

Llegamos a nuestro primer encuentro en el cafetín de la AAA. Estamos emocionadas por empezar con este texto que, en verdad, no tenemos idea de qué formato tendrá, pero nos une la alegría de compartir parte de la historia de este espacio que es un referente importante de la historia del teatro en el Perú. El cafetín es un lugar hermoso, lleno de recuerdos. Sentadas, estamos rodeadas de afiches de espectáculos presentados hace más de 40, 50 o 60 años; el altillo, la madera, el ventanal gigante, característicos de las casas coloniales, por donde han pasado grandes personalidades del teatro peruano. En la mesa tenemos fotografías, textos, actas históricas y mucho material que revisar; quizá podamos sistematizarlo, aún no tenemos claro lo que ocurrirá. Impregnado de esta energía, el cafetín de la AAA es el espacio perfecto para nuestro primer encuentro y sirve de inspiración para lanzar la primera pregunta.

Yasmin

Ximenita, debo confesarte que siempre me ha llamado la atención el término “aficionados”, siendo que este espacio ha albergado y sigue albergando a grandes personalidades de la historia del arte y la cultura del país y también del extranjero, profesionales que han tenido reconocimiento dentro y fuera de Perú. Entonces, ¿por qué “aficionados”?

Ximena

Porque en el año 1938, cuando se funda la AAA, el desarrollo de alguna actividad artística no era considerado una profesión. Los asociados de la AAA eran profesionales destacados en otros rubros y, al mismo tiempo, “aficionados”, un término que proviene del latín affectio; es decir, entendieron que era “por amor al arte” que emprendían esta aventura. El gran mérito de los fundadores de la AAA fue comprender el arte y su diversidad como el mejor aliado y elemento fundamental en la formación de la cultura humana, y promover desde esa convicción un espacio de encuentro, generoso y solidario, un espacio de creación en libertad y aprendizaje, donde se hibridaron lenguajes artísticos en continua búsqueda, respondiendo desde sus inicios a propuestas contemporáneas e innovadoras. La particularidad de esta institución ha sido promover todas las artes: literatura, pintura, danza, teatro, cine, fotografía, música, canto, radio, etc. Es importante mencionar que la sostenibilidad de la AAA se inicia con las aportaciones de sus miembros: el gran trabajo y la meritoria tarea que estos realizaron fue entusiasmar y conminar a muchas más personas y empresas para que sean parte de esta gesta trascendental.

1. Este artículo testimonial sobre los 85 años de historia de la AAA, se encuentra completo en el libro Artistas-investigadoras/es y producción de conocimiento desde la escena. Una filosofía de la praxis teatral. Tomo IV, publicado por el Fondo Editorial de la ENSAD y disponible para su lectura en línea en el siguiente enlace